La Selección Argentina jugó mal en el debut y apenas sacó un empate por una volea de Agüero. Arrancó con toque, pero Bolivia se cerró bien y llegó al gol en un error de Banega. El miércoles debe levantar para ganarle a Colombia.
No, no era un sueño, era real que Romero le tapaba un mano a mano a Martins, pasados los 23 del segundo tiempo, y así evitaba el golpe de nocaut de Bolivia. Era realidad, sí. La Selección Argentina, este equipo de estrellas que a nivel nombres es top a nivel mundial, perdía 1-0 con un rival muy inferior y se salvaba del segundo. Estaba nervioso, desconcertado por ese gol en el arranque del segundo tiempo y ése pudo ser el puñetazo que no supo dar Bolivia.
Y entonces ahí renació el equipo, yendo al frente con actitud y ganas, con poco fútbol del bueno. Poco de lo que pregona Batista, el toque por abajo, la jugada elaborada. La Selección Argentina, que había zafado del 0-2, sufría contra un equipo que supo plantarse bien con dos líneas de cuatro, que cerró espacios y que supo llevar el partido, haciendo tiempo y sin pegar muchas patadas.
Argentina sufría más que en el primer tiempo, en el que había aprisionado por momentos al rival, en el que Messi había tenido algunos arranques con su típica velocidad, esquivando muñecos y hasta sirviéndole un gol a Tevez. Hablando de Carlitos, el jugador del pueblo, el más ovacionado, ¿cómo puede ser que sea lo que es en el City y que se lo vea así con la celeste y blanca, impotente, chocando, con nula participación en el ST (sólo le hicieron una falta y pateó la última del partido), se preguntaban argentinos con los cuales tuve la oportunidad de ver el partido.
Después de un primer tiempo mediocre, en el que la Selección local se pudo haber ido arriba, en el segundo se esperaba una avalancha boluda. Pero no, el gol de Bolivia generó nervios que paralizaron. Di María (entró por Cambiasso, y Carlitos fue más hacia el centro) empujó verticalmente por izquierda y generó algo de ilusión, pero no hubo fútbol, Banega siguio intrascendente y Messi perdido entre tanta pierna. Tan apagado que tuvo un tiro libre en el puerta del área, que terminó en tirito en la barrera. Leo, sin dudas, no fue líder y estuvo lejos, muy lejos de lo que pueda dar, poco partricipativo en el ST.
Cuando uno no sólo esperaba ganar, sino jugar bien, se llegó a la media hora en desventaja. Batista metió a Agüero por Lavezzi y el Kun entró metido, enganchado: casi empata en una personal y después puso el 1-1 con una gran definición. La Selección blanquiazul apostaba al 2-1 en el final, sólo con garra, expuesta a la contra de un rival que se animaba a tocar y a llegar con peligro, incluso.
El arranque soñado pudo ser pesadilla. Pero apareció Agüero para que no fue una noche negra. Un 1-1 con Bolivia, y jugando mal, resultado histórico para el visitante vestido de verde, ¿a quién no le puede caer mal? Con nombres no alcanza. Kun esto no alcanza. ¡Qué verde está Argentina!
Para finalizar, Aguero y Di Maria con poco demostraron que deben ser titulares y la cuestión es; con tantos delanteros de primer nivel en el banquillo seguirá insistiendo con Tevez o le dará la oportunidad al "Pipita" por ejemplo...
Hoy se completa el grupo con Colombia vs Costa rica 20:30hs.
Guille Peña
Y entonces ahí renació el equipo, yendo al frente con actitud y ganas, con poco fútbol del bueno. Poco de lo que pregona Batista, el toque por abajo, la jugada elaborada. La Selección Argentina, que había zafado del 0-2, sufría contra un equipo que supo plantarse bien con dos líneas de cuatro, que cerró espacios y que supo llevar el partido, haciendo tiempo y sin pegar muchas patadas.
Argentina sufría más que en el primer tiempo, en el que había aprisionado por momentos al rival, en el que Messi había tenido algunos arranques con su típica velocidad, esquivando muñecos y hasta sirviéndole un gol a Tevez. Hablando de Carlitos, el jugador del pueblo, el más ovacionado, ¿cómo puede ser que sea lo que es en el City y que se lo vea así con la celeste y blanca, impotente, chocando, con nula participación en el ST (sólo le hicieron una falta y pateó la última del partido), se preguntaban argentinos con los cuales tuve la oportunidad de ver el partido.
Después de un primer tiempo mediocre, en el que la Selección local se pudo haber ido arriba, en el segundo se esperaba una avalancha boluda. Pero no, el gol de Bolivia generó nervios que paralizaron. Di María (entró por Cambiasso, y Carlitos fue más hacia el centro) empujó verticalmente por izquierda y generó algo de ilusión, pero no hubo fútbol, Banega siguio intrascendente y Messi perdido entre tanta pierna. Tan apagado que tuvo un tiro libre en el puerta del área, que terminó en tirito en la barrera. Leo, sin dudas, no fue líder y estuvo lejos, muy lejos de lo que pueda dar, poco partricipativo en el ST.
Cuando uno no sólo esperaba ganar, sino jugar bien, se llegó a la media hora en desventaja. Batista metió a Agüero por Lavezzi y el Kun entró metido, enganchado: casi empata en una personal y después puso el 1-1 con una gran definición. La Selección blanquiazul apostaba al 2-1 en el final, sólo con garra, expuesta a la contra de un rival que se animaba a tocar y a llegar con peligro, incluso.
El arranque soñado pudo ser pesadilla. Pero apareció Agüero para que no fue una noche negra. Un 1-1 con Bolivia, y jugando mal, resultado histórico para el visitante vestido de verde, ¿a quién no le puede caer mal? Con nombres no alcanza. Kun esto no alcanza. ¡Qué verde está Argentina!
Para finalizar, Aguero y Di Maria con poco demostraron que deben ser titulares y la cuestión es; con tantos delanteros de primer nivel en el banquillo seguirá insistiendo con Tevez o le dará la oportunidad al "Pipita" por ejemplo...
Hoy se completa el grupo con Colombia vs Costa rica 20:30hs.
Guille Peña
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